El autodiagnóstico de Altas Capacidades es un fenómeno cada vez más común, especialmente con la información que encontramos en internet, la facilidad de acceso a tests y cuestionarios en línea y el auge de los de especialistas que hablan de ello en redes sociales. Sin embargo, este autodiagnóstico puede ser problemático y tener consecuencias negativas, especialmente si existen problemas de neurodesarrollo subyacentes que no se abordan adecuadamente.
Es normal encontrar muchos padres que hablan de que sus hijos tienen Altas Capacidades e incluso nos estamos encontrando estos diagnósticos cada vez con más frecuencia en centros escolares (incluso por parte del profesorado de Educación Infantil). Muchos de estos casos que nos encontramos, una vez los analizas, vemos que tienen muchos matices, y creemos que es importante remarcar los riesgos que conlleva hacer un mal diagnóstico de las Altas Capacidades.
Riesgos del autodiagnóstico en Altas Capacidades
Si diagnosticamos las Altas Capacidades en nosotros o nuestros familiares a través de test de internet o con consultorías que no hacen un estudio en profundidad del funcionamiento de la cognición de la persona afectada, nos vamos a encontrar con estos dos problemas principales:
- Falta de precisión en el diagnóstico: Los tests en línea y los autodiagnósticos carecen del rigor científico y la precisión de una evaluación profesional. Los especialistas que no realizan un estudio profundo de la cognición pueden no acabar de entender cómo funciona el cerebro de la persona que está siendo evaluada. Esto puede llevar a diagnósticos erróneos o incompletos.
- Desatención de problemas de neurodesarrollo relevantes: En muchos casos, los síntomas que se interpretan como altas capacidades pueden ser indicativos de otros problemas de neurodesarrollo, como el TDAH, el Trastorno del Espectro Autista o Síndrome Asperger. Si estos problemas no se diagnostican y tratan adecuadamente, pueden desencadenar problemas a lo largo de toda la vida de la persona afectada.
Para explicar mejor estos puntos, vamos a contar un caso figurado que nos estamos encontrando continuamente y que se apoya además en muchos de los tópicos que se encuentran en internet:
Un estudiante en la segunda parte de educación primaria, que saca uno o dos sobresalientes con facilidad en las asignaturas que más le gustan, pero saca algún mal resultado y los profesores se quejan de que es muy distraído. No tiene muchas amistades y prefiere hablar con adultos. En situaciones intensas emocionalmente puede tener ataques de ira o bloqueos especialmente llamativos.
Este cuadro perfectamente puede encasillarse dentro de las Altas Capacidades si miras en internet y las redes sociales. De hecho, nos lo encontramos mucho, y suele ir acompañado de estos argumentos:
- Se aburre en clase y por eso es distraído.
- Los sobresalientes casi sin estudiar demuestran la Alta Capacidad.
- Los enfados es porque es muy exigente consigo mismo y busca la excelencia.
- El problema de las amistades es porque es más maduro que el resto y no encaja con ellos, o porque sencillamente no le entienden.
Estos argumentos están enormemente extendidos, sobretodo el del aburrimiento y la auto-exigencia. Pueden ser ciertos, pero encajan muchísimo más en problemas de atención o de interacción social más propios de trastornos del neurodesarrollo (Además, estas personas pueden ser excelentes en las tareas que realmente sí les gustan y donde son capaces de centrar su atención sin esfuerzo sin falta de tener Altas Capacidades).
Por nuestra experiencia, lo normal en estos casos es encontrar problemas del neurodesarrollo (leves en muchos de los casos, pero reales) y creemos que es fundamental remarcar este punto. Aprovechamos para lanzar una pregunta al lector.
Si la persona de la que estamos hablando realmente tiene altas capacidades, bien por él. Cuando crezca, encontrará retos más difíciles y personas más maduras donde encajará y sacará todo su potencial. Pero si tiene un TEA grado 1 o un Síndrome de Asperger, ¿no sería fundamental saberlo cuanto antes para intervenir en aquellos puntos de su cognición donde estén los problemas?. Sabemos, por experiencia, que no es agradable escuchar esos diagnósticos (aunque te los esperes), pero creednos cuando os decimos que no se hace ningún favor al afectado intentando meter debajo de la alfombra los problemas que puedan aparecer.
Consecuencias de no tratar problemas de neurodesarrollo por asumir que son Altas Capacidades
Si confiamos en que una persona tiene Altas Capacidades e ignoramos posibles problemas del neurodesarrollo nos encontraremos con estas incidencias:
- Problemas emocionales y de relaciones sociales: Las personas con problemas de neurodesarrollo no diagnosticados y tratados pueden experimentar dificultades significativas en sus relaciones sociales y emocionales. Esto puede llevar a problemas de autoestima, ansiedad, depresión y aislamiento social.
- Problemas de rendimiento académico: Asumir que la persona afectada no rinde porque se aburre y está por encima de los contenidos que le presentan puede ocultar dificultades para concentrarse, organizarse y completar tareas. Esto será un lastre enorme en el futuro académico si no se aborda en edad temprana.
- Problemas de desarrollo profesional y vital: Los problemas de neurodesarrollo no diagnosticados ni tratados van de la mano de la ansiedad, la depresión y limitan enormemente las oportunidades de desarrollo laboral y personal de los adultos neurodivergentes.
Por tanto, nuestra recomendación, siempre, en cualquier caso de diagnóstico con Altas Capacidades, es buscar profesionales que descarten cualquier problema del neurodesarrollo que pueda lastrar a la persona.
Importancia de una evaluación profesional de las Altas Capacidades
Para evitar los riesgos asociados con el autodiagnóstico, es fundamental buscar una evaluación profesional. Los psicólogos especializados en cognición y otros profesionales de la salud mental pueden realizar evaluaciones exhaustivas que consideren múltiples factores y proporcionen un diagnóstico preciso. Esto permite desarrollar planes de intervención y apoyo adecuados para abordar tanto las Altas Capacidades como cualquier problema de neurodesarrollo subyacente.
Además, desde Vivencias Neurodivergentes tenemos la sensación de que tampoco valen todos los profesionales. Cada vez vemos más alrededor de nuestra red que existen gabinetes "especializados" que no salen de los diagnósticos de TDAH y Altas Capacidades. Incluso nos advierten que en entornos escolares se empieza a hablar de que con un profesional o gabinete concreto consigues más fácil que con otro el diagnóstico en Alta Capacidad para tus hijos. No nos llevemos las manos a la cabeza, esto pasa en todos los sectores, pero para aquellos interesados en su salud o la de sus hijos, por favor, intentad encontrar profesionales que trabajen con todo el espectro de rasgos/trastornos del neurodesarrollo y se centren en el diagnóstico más preciso, y no en el que más nos apetezca a nosotros.